Ese es el nombre tan difícil del viento que sopla desde ayer por toda esta zona, hemos pasado una noche terrible de viento, me había dejado las contraventanas de la cocina abiertas y casi las arranca, Los niños estaban bastante asustados, sobre todo la peque que es muy chiquita y no entiende que no hay peligro dentro de casa.
Lo peor ha sido al salir a la calle, el único árbol que quedaba en pie en la finca ha caído, el viento lo ha partido por la mitad. Era un guindo, no daba casi fruta y encima era amarga, pero daba sombra a los animales y en sus ramas anidaban los pájaros y se comían los frutos, en fín, menos mal que hemos plantado frutales que compensarán su pérdida.
Y al llegar al huerto otro desastre, las habas, que estaban enormes y cargadísimas de vainas se han cído al suelo, muchas están rotas y se perderán, otras espero recuperarlas poniendo tutores cuando pare este viento tan fuerte, el plástico del semillero ha salido volando y mis pobres tomatitos han sufrido mucho, no sé si se recuperarán y ya no me da tiempo a volver a sembrar de nuevo, si no se recuperan me tocará comprar plantas, pero eran variedades que no se consiguen por esta zona ( grodal valenciano, amarillo gigante, negro...).

Aquí las pobres habas tumbadas.
Y aquí como ha quedado el bancal, un desastre.
Algo Bueno os tengo que contar, al menos la gallina esté feliz con sus pollitos, al final le he puesto los cuatro cochin y los tres kikos que eclosionaron, también un Sebright dorado nació, pero ese es tan peque que lo he dejado con las codornices porque me da miedo que lo aplaste y son muy difíciles de sacar, la gallina sólo puso dos huevos y solo ha nacido uno, el otro murió dentro del huevo, debe haber algún problema en la incubadora, tengo que mirarlo con calma porque han muerto varios pollos sin salir del cascarón.

Aquí la mamá enseñando a los peques lo que pueden comer
Desde este ángulo seven todos los pollitos

El pequeño Sebirght entre las codornices, la grande es la que nació el pasado 27, no tiene aún un mes y fijaos lo que ha crecido.
Luego os cuento más cositas, a ver si para el viento de una vez